Los abuelos y los nietos

Hace unos días leí un artículo muy emotivo escrito por el pediatra Enrique Orschanski titulado "Los abuelos nunca mueren, sólo se hacen invisibles".

Durante algunos años, de bonanza económica y de individualismo máximo, los abuelos quedaron relegados en muchas familias, y fue la crisis económica, por desgracia, quien les situó de nuevo en su lugar, un lugar importante en la crianza de los niños.

Por desgracia en ocasiones, vemos abuelos agotados con exceso de responsabilidad en sus nietos, pero otras muchas veces vemos abuelos que disfrutan de alguna tarde de parque con sus nietos, a los que quieren y consienten de forma muy diferente a los padres, y cuando ellos fueron padres.

Los abuelos completan y amplían el espectro familiar y cotidiano de un niño pequeño, personas con otras experiencias y bagajes que ayudan al niño a ampliar su círculo donde sentirse querido y protegido.

Además de ser un gran apoyo para los padres, los abuelos forman parte de la educación de los hijos, transmitiendo valores culturales y morales que complementan a los de los padres, ayudan al niño en el conocimiento de su historia familiar lo que tendrá que ver en la formación de su propia identidad. Ayudan al entendimiento entre padres e hijos, y si todo va bien, los niños saben que sus abuelos les escucharán y les prestarán atención e incluso les mantendrán secretos que no contarán a sus padres.

Para que las normas y límites vayan en la misma dirección entre padres y abuelos y poder respetar la educación que los padres han elegido para sus hijos, es necesario que haya una buena comunicación entre los progenitores y sus padres, para que los niños perciban siempre cierta sintonía.

¡Disfruten los unos de los otros!

Aquí os dejo el artículo por si queréis leerlo:

https://lamenteesmaravillosa.com/abuelos-nunca-mueren-vuelven-invisibles/